No Morirás por un Corazón Roto

Es muy difícil enamorarse.
Mi generación tiene la particularidad de haber sido criada para estar siempre a la defensiva, con ambición pero a la vez con mucho miedo. Somos la primera generación a la que se le recompensa por solo participar y probablemente ello es lo que nos haya hecho algo narcisistas e incluso un poco egoístas. ¿Creemos que nos merecemos todo? ¿Creemos que todo es fácil?
Todo eso termina cuando alguien te gusta en serio.

Una de las cosas más difíciles de querer a alguien es dejar de pensar en uno y comenzar a pensar en otro. Ya no haces cosas solo porque quieres, ahora la prioridad está en hacer algo para ver feliz a la otra persona, así sea algo tan tonto como ver la película de Sex and the City (mis respetos a todos los chicos que soportaron eso, ni yo lo hice) o una tarde en un estadio en el cual no sabes ni quién juega ni para dónde es gol en contra o a favor (HOLAAAAA!).

Ya no te arreglas para ver a quién puedes atrapar. Te vistes para pasar una linda tarde con la persona a quien quieres, porque a veces esos momentos no necesitan tacos, minis, maquillaje o push-up...
Bueno, tal vez no tenemos que dejar el maquillaje y el escote o la mini  de lado.

A pesar de nuestra facilidad para aprender a hacer cosas (porque siendo sinceros, Youtube y sus tutoriales salvan la vida de cualquier enamorado pobre) nos cuesta mucho hacer algo para ellos, y es porque es para ELLOS.

Aprendemos un nuevo deporte, nos hacemos fans de una serie tonta, e incluso compramos juguetitos mañosones para jugar entre dos... pero hay algo que cuesta más que todo: confiar.

Puedes querer, amar, decir te amo y prestarle tu colección de ChipiTaps de Pokemón pero es muy difícil confiar en alguien al 100% porque lo único que te detiene es el miedo a que te rompan el corazón. Te tengo una novedad: te lo romperán de todas formas. A veces será a propósito, otras por tu propio bien y a veces porque las cosas no van como querías pero nunca morirás de ello. El amor no mata, tal vez lo haga la dieta loca que estás haciendo para verano, o los taco 12 que estás usando cuando se te meta el taco en un hueco, pero un corazón roto nunca se desangrará.

¿Por qué cuesta tanto? Tal vez porque te han decepcionado antes, quizás porque viste muchas novelas de Thalia o tal vez porque nadie te enseñó a confiar y lo desconocido siempre es difícil de aceptar.

Te tengo otra noticia: A veces la gente puede sorprender y puedas tener tu felices por siempre...

... claro que las carrozas son caras y no hay castillos cerca pero no seas tan quisquillosa.

:)