Viendo la regla desde el lado amable

El ser mujer tiene sus beneficios: Entramos gratis a las discos, tomamos gratis, en el bus nos ofrecen asiento, tenemos escusas para llorar y comer helado como locas cuando nos da la gana, tenemos más ropa que los hombres y mucho más barata… pero nada es gratis en la vida, ésta  también tiene formas cobrártelas todas en largas y extensas cuotas mensuales llenas de dolor, hinchazón, antojos de embarazada loca y ataques de bipolaridad.

Creo que fue gracias a una serpiente y una manzana que Dios decidió darnos éste recordatorio mensual ¿Acaso no podían haber estar haciendo cositas entre los arbustos en vez de tragarse el fucking fruto?  

Cuando era niña muchas de mis amigas llegaban al colegio felices porque en su familia habían hecho una gran celebración porque habían tenido la menstruación “¿Fiesta por sangrar?” pensaba yo hasta que me tocó a mí… una semana de dolor, fiebre y ganas de vomitar; nadie sabía lo que tenía y yo tenía miedo de haberme contagiado de algo raro como la malaria, el dengue o la gonorrea por esa mala costumbre de morderme las uñas.

Desde que tengo memoria mi cuerpo se exprime internamente cuando se acera ésta semana y a pesar de todo puedo decir que también tiene su parte buena ¡LO DIGO EN SERIO! No estoy en la etapa de negación ni nada por el estilo.

Examinemos la situación:

Por una semana al mes te pones ropa realmente cómoda; no sólo porque nada te queda debido a que te hinchas como un pez globo, sino porque en verdad tu cuerpo necesita estar sin pantalones apretados, tacos o fajas. Por una semana al mes tus rojos gritan ¡LIBERTAD!

Las mujeres tenemos el trauma de engordar; siempre empezamos una dieta nueva y 5 días después  la rompemos, pero ésta semana nada nos importa. ¡GUARDEN LAS TORTAS Y LAS GALLETAS! ¡OCULTEN LAS EMPANADAS Y LOS SANGUCHONES! ¡LA NUTELLA Y LOS NIÑOS PRIMEROOOOO! ¿ah?

Éste es el momento en el mes en que te lo quieres comer todo. Es que tu sistema reproductivo se alía con tu estómago para darte un ataque de antojos de cualquier producto lleno de grasa, calorías, aminoácidos, proteínas GRRAR GRRAR  GRASAAAA GRASAAAA #SoyUnZombie
Al final no importa si rompes la dieta o no, quieres comerte algo y es en ese momento en que se sentirá mucho mejor y sin menos culpas que si lo hicieses cuando no estás reglando.

Cuando pasas la barrera de los 18 es casi obvio que has tenido sexo, aunque creo que ahora las niñas conocen al pajarito antes de comenzar a usar push-up. 

Cuando una vida sexual llena de sudor, gritos y arañazos ha empezado (lo siento me dejé llevar), uno de los temores más grandes que puedes tener en tu vida llega justo en el momento en que se va tu virginidad ¿Abré quedado en bola? ¿El condón no tendrá hueco? ¿Las pastillas funcionarán bien? ¿Me habré olvidado de tomar alguna pastilla? ¿Estaré embarazada?
No importa cuántas previsiones has tomado, la duda y el miedo a lo impredecible se implantará en tu cerebro hasta que se dé la razón positiva número 1 de la menstruación…

¡NO ESTOY EN BOLA!

Advertencia: En caso se posees testosterona en el organismo en grandes proporciones y al leer esto se ha sentido mareado y con sensaciones incómodas recomiendo tomar té de orégano bien calientito, me lo daban en el cole para todo y sí funcionaba :D